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¿Cómo elegir un portabebés?

Los portabebés nos dan la posibilidad de trasladarnos con nuestro pequeño sin necesidad de usar el cochecito. ¿Qué tener en cuenta antes de elegir uno?

Los portabebés son una opción cada vez más elegida ya que nos permite tener las manos libres mientras transportamos a nuestro bebé en casa o afuera, pegadito a nosotras.

¿Cuál es el portabebés más seguro?


Teniendo en cuenta los beneficios del contacto cercano con el bebé, que según distintas investigaciones favorece el apego, la lactancia e, incluso, el sueño, estos accesorios pueden ser muy tentadores, pero es importante detenerse en lo fundamental antes de elegir.

Los especialistas recomiendan, más allá del modelo en sí, que el portabebés sea:

  • Acorde al peso y edad del bebé: algunos portabebés no están diseñados para ser utilizados con recién nacidos, por eso, es importante verificar primero el límite de peso más bajo y el máximo y si el modelo se adapta al desarrollo del bebé y sostiene su cabecita cuando aún no puede sostenerla por sí solo.
  • Cómodo: probarlo antes con el bebé es importante para comprobar si es cómodo tanto para la mamá como para el bebé. También hay que pensar en qué situaciones se va a utilizar y cuánto, de manera de elegir el modelo ideal. Hay padres que piensan usarlo en su casa, otros que planean utilizarlo siempre para evitar salir con el cochecito y otros que lo quieren solo para viajes o vacaciones.


¿Cuál sería la posición más correcta para las caderas del bebé al llevarlo en un portabebés?
Al nacer, el bebé tiene las piernas en una postura similar a como las tenía dentro de la panza de su mamá: separadas, en flexión y rotación externa (abiertas). Desde esta postura hace continuos movimientos de pataleo estimulando así un correcto desarrollo de la cadera y una movilidad completa.

Por eso, la mejor postura en un portabebés es la que respeta esto. Es decir, lo ideal es que las piernas del bebé queden separadas (en abducción) y tengan la mayor libertad de movimiento en flexión, extensión y rotación.

Tipos de portabebés


- Mochilas

Las mochilas suelen ser las más elegidas por su practicidad y porque soportan mucho peso. Tiene buenos puntos de apoyo, se coloca y se quita fácilmente y puede utilizarse en la espalda o adelante (se recomienda esperar a que el bebé se siente y sostenga bien su cabeza para utilizarla en la espalda).



mochila portabebe
Imagen: Maternelle
 

- Fular
El fular, cada vez más utilizado como portabebés por su comodidad y versatilidad, es un trozo de tela rectangular de 5 metros de largo por 80 centímetros de ancho, aproximadamente, que se coloca alrededor del cuerpo del porteador, teniendo en cuenta los puntos de apoyo más fuertes, y que envuelve al bebé. Se puede usar en distintas posiciones (a la cadera, en la espalda, de frente) y se coloca con un preanudado en el cuerpo de la mamá o el papá, siguiendo las instrucciones del producto, para luego sentar al bebé. En sus primeros días el bebé puede ir como acunado en el fular y también sobre el pecho de la mamá. Luego, a medida que va creciendo, se lo puede colocar sobre la cadera. Hay dos tipos: elásticos o tejidos. El elástico se sugiere para los primeros meses del bebé, aunque se puede seguir usando de más grandes, y para mamás que por primera vez usan portabebés, y el tejido para bebés más grandes.


fularfular portabebe, maminiaImagen: Maminia

 

- Bandoleras
Es un rectángulo de tela largo con anillas en un extremo que sirven para anudarla y ajustarla, y que se coloca sobre un hombro. Reparte el peso entre la espalda y un hombro, haciendo poco apoyo en la cadera, por eso puede no ser la mejor opción para trayectos o períodos de tiempo más largos.

bandoleras, wawitaImagen: Wawita

- Pouch
Formado con una sola pieza de tela ligeramente elástica, al igual que la bandolera, el pouch se coloca sobre un hombro distribuyendo el peso entre este y la espalda. Hay de distintos tamaños teniendo en cuenta la contextura de la mamá y el bebé, por lo que tal vez su contra sea que haya que comprar más de uno a medida que el bebé crece.

pouch maminiaImagen: Maminia


- Mei tai

El Mei Tai es un portabebés de origen asiático. Similar a una mochila, consiste en un rectángulo de tela con cuatro tiras en los extremos que se atan con nudos simples alrededor del cuerpo del adulto: dos en las caderas y dos que pasan por los hombros (suelen ser acolchadas), cruzan la espalda hacia delante y vuelven a cruzar bajo la colita del bebé. Se puede usar sobre la espalda, adelante o en la cadera y, para utilizarlo, lo ideal es esperar a que el bebé se siente solo.

mei tai, maminiaImagen: Maminia

 

Para tener en cuenta

 

  • Muchas mamás recomiendan tratar de conseguir un portabebés prestado o al menos poder probarlo con el bebé antes de comprarlo (no probarlo con la panza ni comprarlo en el embarazo) porque es la única manera de saber si va a resultar cómodo. Hay bebés a los que puede resultarles incómoda cierta postura, mamás a las que les resulta incómodo llevar peso en un solo costado y que prefieren las mochila; mamás que prefieren el fular para distribuir mejor el peso, etc. En todo caso, lo ideal es ver los distintos modelos y probar cada uno junto al bebé.
  • Para mamás calurosas, tener al bebé pegado al cuerpo sobre una tela gruesa, mucho tiempo y en pleno verano puedo no ser lo mejor, ni lo más seguro. Ver la tela con la que está fabricado el producto y evaluar si es la opción ideal según la época en la que va a nacer el bebé es lo más recomendable.
  • Si el padre es “grandote” y la mamá pequeña, habrá que tener en cuenta esto si los dos tienen pensado utilizarlo para encontrar el modelo que se ajuste bien a ambos. 
  • Debemos poder colocarnos y sacarnos el portabebés solas, sin necesidad de ayuda, y sentir que el bebé está seguro mientras lo hacemos. Lo ideal es practicar con el vendedor para sacarnos todas las dudas, y en casa, antes de usarlo por primera vez. 
  • Más allá del estampado y el color, lo importante es elegir uno que esté realizado con una tela suave y resistente para mayor comodidad y seguridad del bebé. ¡Y que no destiña!
  • Para las madres que amamantan, el portabebés puede ser una excelente opción si tienen que dar el pecho en público y esta situación las incomoda. Muchos, como el fular y la bandolera, están diseñados de manera que el bebé pueda tomar el pecho sin necesidad de sacarlo del portabebés.    
  • Es importante leer bien las instrucciones del producto para usarlo correctamente, y tener en cuenta estos aspectos: 

    - La cara del bebé siempre debe quedar descubierta para que pueda respirar y hacia un costado de manera de no aplastar su nariz contra nuestro pecho.

    - En el portabebés, el niño debe estar a la misma altura que cuando lo alzamos y pegadito a nuestro cuerpo. Si va sobre nuestro pecho o a un costado, debemos poder besar su cabeza con solo bajar la cara.

    - Evitar el calor en exceso cuando va en el portabebés y revisar si está transpirado. Si es necesario, quitarle las prendas para que esté más cómodo.

    - La idea del portabebés es que nos queden las manos libres y que sintamos que el bebé está seguro y cómodo, que no se puede caer, balancear o quedar colgando. Para eso es importante revisar las correas, tiras o sostenes del producto y si se pueden ajustar bien a nuestro cuerpo, mientras sostienen correctamente al bebé.

 

Asesoraron: Dra. Marisa Jaitt, pediatra;
Dra. Verónica Gleich, traumatóloga

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