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El estrés en el bebé prematuro

Durante los cuidados cotidianos del bebé prematuro como cambiarle los pañales, alimentarlo, o cuando se los sobre excita con los ruidos fuertes o la luz intensa es probable que los bebés prematuros muestren síntomas de estrés.

Durante los cuidados cotidianos como cambiarle los pañales, alimentarlo, realizar intervenciones como extraerle sangre, ponerle suero, sacarle radiografías, ecografías, o cuando se los sobre excita con los ruidos fuertes o la luz intensa es probable que los bebés prematuros muestren síntomas de estrés.

Al observarlo puede que:

  • Cambie el color de la piel
  • La respiración y el ritmo cardíaco sean desiguales
  • Su cuerpo se arquee, se crispe, esté tenso, tiemble o esté flojo.
  • No se mantiene en posición fetal
  • No se mantiene en estado de alerta o preste atención mucho tiempo.
  • No mire fijamente o se canse tratando de responder a los estímulos
  • Le cuesta recobrar la calma después de que se lo haya excitado
  • No puede prestar atención a dos estímulos a la vez, como alimentarlo y hablarle.

Los papás pueden aprender a leer sus reacciones

Si se manifiestan estos síntomas hay que tratar de contenerlos, de ayudarlos a serenarse. ¿De qué forma?

  • tratando de que mantenga la posición de flexión prenatal
  • minimizar la estimulación, sobre todo la sonora o luminosa.
  • no hablarle
  • se lo puede ayudar para que se lleve las manitos a la boca, las podrá chupar y eso lo tranquilizará.
  • ofrecerle algo que les permita apoyar los pies, le dará la sensación de contención.

Siempre es necesario comunicarle al personal de la UCIN los cambios observados en el bebé, por mínimos que sean. El equipo de salud los orientará en el cuidado del niño.

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