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Día del niño superespecial

El Día del Niño suele venir de la mano de juguetes, pero hay muchas otras maneras de celebrar y de aprovechar esta oportunidad para dejarles a los chicos un recuerdo único.

Regalarles un momento especial


Sí, ellos esperan un regalo, y a nosotros nos encanta darles aquello que desean hace tanto tiempo, y no está nada mal. Pero también podemos pensar en darle un valor agregado a nuestro regalo creando un momento único para que recuerden ese Día del Niño con cariño. 

Primero, podemos empezar por una previa que les genere expectativa: “¡Se viene el día del niño! ¿Qué te gustaría hacer? ¿Qué te divierte? ¿A dónde te gustaría ir?” son frases que van a ir alimentando este día con esa ilusión de lo que está por venir.

Y luego, pensar en algo especial. Despertarlos con el desayuno en la cama, prepararles esa comida que les encanta, armar una merienda con sus tíos, primos, abuelos, ir de picnic en familia, a un parque de diversiones, a patinar sobre hielo, pasar un día de campo todos juntos, remontar barriletes o compartir cualquier otra actividad que ellos disfruten mucho son momentos que quedarán en la memoria de cada uno y que van más allá de un objeto.

 

La sorpresa esperada


Al momento de pensar en el regalo, más allá de lo que nosotros creemos que le va a gustar, es importante preguntarle al protagonista qué le gustaría recibir y si quiere que sea sorpresa o prefiere que lo elijamos juntos. Si se trata de un regalo muy alocado o costoso, podemos darle distintas opciones que se acerquen lo más posible a lo que pidió.

Y si es algo que desea hace mucho tiempo, pero que se nos va del presupuesto, una “vaquita familiar” es una buena opción. A los que participen les encantará ver su cara de alegría al recibir ese regalo tan esperado!

Si prefiere una sorpresa, esta nota sobre los mejores juguetes para cada etapa puede servir de orientación.

 

Enseñarles a valorar los regalos


Cuando nos pide algo y se lo regalamos enseguida, sin esperar una ocasión especial ni generarle expectativa, puede suceder que el niño pierda esa posibilidad de experimentar la anticipación, la ilusión por lo que vendrá, porque al fin y al cabo está acostumbrado a no tener que esperar por lo que quiere. Y como valorar viene de la mano de desear, regalares cosas todo el tiempo hace que los chicos también vayan perdiendo esa posibilidad.

Que los niños piensen en el regalo como un proyecto, algo que esperan, añoran, que saben que va a venir, es una manera de convertir un objeto en algo más que eso y de darles la oportunidad de que puedan valorarlo.

La gratificación se verá reflejada en esa sonrisa al abrir el paquete y en esa seguridad de que finalmente cumplimos con lo prometido; y podemos aprovechar esta ocasión para mostrarle a nuestro hijo lo orgullosos que estamos de que haya podido esperar para tener eso que tanto quería.

 

Cultivar la solidaridad


Para el Día del Niño podemos elegir con ellos juguetes para donar a un hogar o para llevar al hospital, siempre teniendo en cuenta que la solidaridad, pensar en el otro, ocuparnos de los demás, es algo que se cultiva día a día con gestos y actos tan simples como llamar a los abuelos para ver cómo están, llamar al compañerito que está faltando al colegio para ver si necesita algo, ayudar con las tareas de la casa, etc. y que es un ejemplo que le transmitimos a nuestros hijos desde la alegría y nunca desde la culpa o la obligación.


¡Feliz día del niño para todos!

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