Los cítricos: la fruta “estrella” del invierno

Para enfrentar el frío con las defensas altas y prevenir gripes y resfríos, la vitamina C de los cítricos es fundamental. Sumar un jugo de naranja recién exprimido al desayuno de los chicos antes de ir al jardín o a la escuela alcanza para cubrir las necesidades de esta vitamina. Pero hay muchas otras maneras de aprovechar esta fruta de temporada: desde el pomelo cortado al medio y espolvoreado con azúcar hasta una rica torta de mandarina, hay opciones para todos los gustos.

Cuando el pediatra permite la incorporación de cítricos en la dieta del bebé –alrededor de los siete u ocho meses-, hay que empezar a aprovechar los beneficios de estas frutas y recordar que siempre deben ofrecerse al bebé sin hollejos, ya que no puede digerirlos.

Para la embarazada, la fórmula “cítrico + legumbre” es básica para ayudar a fijar el hierro de esta última, tan importante para prevenir la anemia durante el embarazo.

Otra forma de consumir cítricos es cambiar la cuota de acidez que aportan el vinagre o el aceto a la ensalada por jugo de limón. Y sumergir 10 minutos el limón en agua caliente antes de cortarlo es bueno para conseguir más jugo más rápidamente.

Además de contener vitamina C, los cítricos son ricos en oligoelementos, son una buena fuente de potasio y calcio, contienen antioxidantes y ácido fólico. Podría decirse que, además de elevar las defensas, los cítricos son “amigos del corazón”, porque el conjunto de sus beneficios ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares. Por supuesto, estos beneficios se aprovechan siempre y cuando se complementen con una vida con hábitos saludables.

Aquí, distintas recetas para incorporar los cítricos al menú familiar:

Papilla de manzana y naranja con leche: una opción deliciosa para el bebé que seguramente el hermano mayor querrá comer como postrecito. Ver receta

Pollo agridulce: una receta con limón para recibir aplausos. Y cuidado: no hay que dar por sentado que a los chicos no les gusta la mezcla de sabores, es importante enseñarles a comer de todo. Ver receta

Budín de naranja: para un desayuno o merienda, una propuesta para cambiar las galletitas industriales por repostería casera y llena de vitaminas. Ver receta

Ensalada de lentejas, pomelo y atún: una excelente entrada para la embarazada, que le permite aprovechar todos los beneficios de la legumbre gracias a la vitamina C del pomelo. Ver receta