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Dormir a upa o en la cama de sus padres: ¿cómo cambiar estos hábitos?

Es muy importante que cada integrante de la familia tenga su lugar para dormir: el bebé en su habitación y los padres en la suya. Al tener cada uno su propio espacio, todos estarán más tranquilos relajados para dormir.Para anticipar cuál es el momento indicado para dormir al bebé, conviene crear hábitos y rutinas, siempre iguales, siguiendo el ritmo del hogar y de la familia. Por ejemplo, bañarlo, jugar un rato, cenar, leer libritos y luego, explicarle que «ahora es el momento de dormir», llevándolo a su cuna con su muñeco favorito y acompañándolo por unos minutos para que se adapte a esta nueva modalidad de dormirse en su cuna.Seguramente esta nueva rutina no será del agrado del bebé —que hasta entonces sólo lograba dormirse en brazos—, y posiblemente llore porque está asustado ya que se produjo un cambio en su rutina. Pero si los padres le demuestran seguridad, sabiendo que esto lo hacen por el bienestar de la familia, pasados unos días, se acostumbrará a esta nueva rutina. Dormir bien es muy necesario para la salud del bebé y para la de toda la familia. Es el rol de los padres enseñarle a dormir teniendo en cuenta que todo aprendizaje lleva tiempo, sin seguir “recetas mágicas” y guiándose también por la intuición.Si la situación se tornase difícil de llevar adelante, siempre se puede recurrir a un profesional idóneo que acompañe a la familia en este proceso.

Es muy importante que cada integrante de la familia tenga su lugar para dormir: el bebé en su habitación y los padres en la suya. Al tener cada uno su propio espacio, todos estarán más tranquilos relajados para dormir.

Para anticipar cuál es el momento indicado para dormir al bebé, conviene crear hábitos y rutinas, siempre iguales, siguiendo el ritmo del hogar y de la familia. Por ejemplo, bañarlo, jugar un rato, cenar, leer libritos y luego, explicarle que «ahora es el momento de dormir», llevándolo a su cuna con su muñeco favorito y acompañándolo por unos minutos para que se adapte a esta nueva modalidad de dormirse en su cuna.

Seguramente esta nueva rutina no será del agrado del bebé —que hasta entonces sólo lograba dormirse en brazos—, y posiblemente llore porque está asustado ya que se produjo un cambio en su rutina. Pero si los padres le demuestran seguridad, sabiendo que esto lo hacen por el bienestar de la familia, pasados unos días, se acostumbrará a esta nueva rutina.

Dormir bien es muy necesario para la salud del bebé y para la de toda la familia. Es el rol de los padres enseñarle a dormir teniendo en cuenta que todo aprendizaje lleva tiempo, sin seguir “recetas mágicas” y guiándose también por la intuición.

Si la situación se tornase difícil de llevar adelante, siempre se puede recurrir a un profesional idóneo que acompañe a la familia en este proceso.