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Adolescentes: La nueva tendencia de exhibirse a través de Internet

Poses y gestos provocativos en cuerpos y caras aniñadas forman parte de las fotos que circulan por Internet y a través de los celulares. Esta tendencia denominada “sexting” tiene como protagonistas a los adolescentes y es una nueva preocupación para los padres.



El sexting, palabra que resulta de la conjunción entre los términos ingleses sex y texting (sexo y envío de textos), es explicado por los especialistas como la tendencia de los adolescentes a intercambiar fotos propias con alto contenido erótico, utilizando como medio los mensajes de texto e Internet.

Además de los celulares, las redes sociales o los e-mails son las principales fuentes de esta nueva tendencia que cuenta cada día con más adeptos argentinos. Lo que más preocupa es que, según la consultora Ignis, gran cantidad de adolescentes de entre 12 y 18 años, que tienen acceso a Internet y a celulares, reconocieron haber subido a la web o enviado a través de celulares fotos provocativas de ellos mismo.

Internet es un claro reflejo de esta tendencia, no sólo porque hay sitios web que reciben fotos que les envían los adolescentes bajo seudónimos (en su mayoría chicas) y las suben a su fotogalerías, sino además debido a que este tipo de imágenes son muy visibles en redes sociales como Facebook. 

¿Cuáles son las causas de esta tendencia?

Según los especialistas, las razones de este fenómenos radican en distintos aspectos. La desatención por parte de la familia es uno de ellos, el avance de la tecnología y el creciente acceso a la misma también lo es. A estos se suma la falta de control por parte de los padres ante una tecnología que muchos de ellos no comprenden y que a su vez, los chicos manejan sin medir las consecuencias.

Este último aspecto lo explica claramente el director de la Fundación Proyecto Padres Adrián Dall´Asta, quien opina que la brecha generacional que plantean las nuevas tecnologías ha producido una paradoja educativa muy particular, según la cual los hijos enseñan a los adultos el manejo de las herramientas informáticas.

Dall´Asta agrega que el desconocimiento de estas herramientas por parte de los padres produce distintas sensaciones en los adultos, que van desde un temor excesivo hasta una falta de interés, producto de la ignorancia, aunque no de la indiferencia. A su vez está el otro extremo que es la sobrevaloración de las tecnologías.

Con respecto al comportamiento de los adolescentes, Dall´Asta  considera que la motivación de los jóvenes ante las nuevas tecnologías tiene más que ver con la exploración y la facilidad de acceder a las cosas que con una patología.

Lo ideal en estos casos, según el especialista, es que los padres adquieran una postura abierta a un nuevo modelo de comunicación que vino para quedarse, pero que debe tener un gran control y seguimiento diario.

Es importante tener en cuenta que Internet es un medio de comunicación como el teléfono y que  no se le puede atribuir ninguna condición maligna, afirma la psicoanalista Diana Litvinoff.

Como todos los demás medios, Internet puede ser usado de manera abusiva o de una manera productiva de expresión y comunicación. Por ejemplo, en el caso de Facebook, hay que ser conscientes, según Litvinoff, de que también es un espacio de intercambio de cosas positivas: poco se habla de que los jóvenes intercambian poesías propias o ajenas, se recomiendan libros, se apoyan en momentos de angustia, intercambian ideas políticas y acerca de lo que sucede .

¿Por qué hay tanta necesidad de exhibirse por parte de los adolescentes?

Diana Litvinoff, autora además del libro El sujeto escondido en la realidad virtual y miembro de la Asociación Psicoanalítica Argentina, explica que hay una nueva tendencia de exhibicionismo por parte de los adolescentes debido a que vivimos en una época en la que todo lo íntimo se expone. Desde el sexo hasta la violencia se muestran como si fueran espectáculos.

Con respecto al término “exposición,” puede ser tomado en dos acepciones según la psicoanalista: Una en el sentido de exhibición, aspecto del que los adolescentes son conscientes y están orgullosos de eso porque esta es una época en la que se enaltece el ser famoso, aparecer en los medios, e Internet es hoy una pantalla más donde mostrarse. Otra en el sentido de quedar expuesto a un peligro, en este caso, muchas veces el adolescente no es consciente, debido a que hay un alto nivel de ingenuidad.

Litvinoff agrega que si un adolescente descubre que sus fotos y videos fueron utilizados con otros fines, la primera reacción es la vergüenza, ya que el hace una exposición confiando en cierta discreción del que lo recibe, y esto no resulta como lo esperaba produciendo una sensación de traición y de vergüenza social.

Por esto la especialista hace hincapié en que los padres expliquen a sus hijos acerca de lo importante que es que reserven para la intimidad determinadas expresiones fotográficas o fílmicas.

Por otro lado, en relación a la exposición, el doctor en psiquiatría y especialista en niños, adolescentes y tecnología, José Sahovaler, explicó que todo el mundo se expone desde siempre; no sólo los adolescentes. Sin embargo, en el caso de los adolescentes es más importante ya que por una razón propia de la edad, ellos necesitan mostrarse para reafirmar su sexualidad. Y es a través de la mirada del otro, que uno se construye y define sexualmente.

Las preguntas que los adolescentes hacen acerca de su sexualidad tienen que ver con si son atractivos o no; si gustan o no; si son masculinos o no y esto está relacionado con la mirada del otro, remarca Sahovaler.

Con respecto a las poses y gestos provocativos, el doctor explica que tiene que ver con dos cosas: los adolescentes saben de la sexualidad y saben para qué sirve el cuerpo y a esto se suma el exhibicionismo impúdico que se ve en los medios.

Cómo darse cuenta y prevenir

Algunas señales que pueden servir para comenzar a prestar más atención acerca del uso de Internet por parte de un hijo son:

  • Si el chico minimiza todas las ventanas cuando el padre pasa.
  • Si el adolescente se conecta sólo por las noches o cuando sus padres duermen y no pueden verlo, también es una razón para estar alerta.
  • Si el chico sufre un cambio de conducta, no habla o se aísla.

Para evitar situaciones indeseadas en relación al uso de Internet y un futuro problema para los hijos, lo primordial es estar cerca de los chicos, no mostrarse confrontativos sino comprensivos, sin dejar de decir que No en los casos que sea necesario.

También es importante que los chicos tengan una computadora, sepan navegar y encontrar todos los aspectos positivos que ofrece Internet, bajo la supervisión de sus padres que, a su vez, deben conocer la tecnología y el manejo de las herramientas informáticas para poder incitar y enseñarle a sus hijos a utilizarlas correctamente.

Fuente: diario La Nación 10 de julio de 2010