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Los accesorios en la moda

Un vestido o un conjunto sencillos pueden sufrir una metamorfosis y transformarse en exquisitos si se combina con el accesorio adecuado: aros, collares, anillos y relojes, entre otros, forman un conjunto que merece atención especial.

Vestirse no consiste simplemente en elegir un vestido, sino en armar un conjunto armónico entre varios elementos y los accesorios son, sin duda, objetos que pueden arruinar o enriquecer el look de quien los lleva.

Una mala elección puede ser fatal, porque sólo elegir unos aros excesivamente grandes o excesivamente coloridos puede atraer la atención y dejar de lado, por ejemplo, un traje de corte impecable. Por eso, hay algunos consejos a tener en cuenta a la hora de elegir los accesorios que se van a sacar del placard:

Los relojes: usarlos da un aspecto más profesional. Pueden combinarse con la ropa si se tienen varios de distintos colores y materiales o elegir uno clásico y preferentemente de malla metálica que vaya bien tanto con un jean y una remera como con el tailleur para la oficina. No deben ser demasiado grandes ni pequeños: el tamaño adecuado surge de la relación con la muñeca y la contextura de su dueña.

Los anillos: un solo anillo puede ser más adecuado que una mano repleta de brillos que no se distingan entre sí. Hay que elegirlos con cuidado teniendo en cuenta la hora del día y el lugar y la actividad que se está realizando. El tamaño también debe tener relación con la mano y hay que saber que si se coloca un anillo, las manos y las uñas deben estar prolijas y cuidadas, ya que estos accesorios atraen la atención hacia ellas.

Los aros: cortos para el día y largos para la noche es la pauta general. Ahora, si el cuello es corto, conviene evitar los aros colgantes. Si los aros no son perlas o cristales, hay que combinarlos con los demás accesorios y hasta con la ropa. Por ejemplo, si se lleva una cadenita de oro, no conviene elegir aros con mostacillas de colores, sino algo también de oro o por lo menos dorado. No hay que exagerar con el tamaño y el color de los aros, que llaman mucho la atención, y si se eligen unos llamativos hay que balancear el resto del conjunto para que no resulte sobrecargado.

Las pulseras: Entre los anillos, pulseras, reloj y aros debe existir una coherencia. No siempre debe ser necesariamente un conjunto, pero sí deben tener un criterio común. No conviene elegir pulseras muy grandes ni combinarlas de manera que se entrechoquen y tintineen permanentemente, ya que puede resultar molesto.

Los collares: para combinar con las distintas prendas y escotes, conviene tener collares tipo gargantilla, otros que lleguen sólo hasta el centro del pecho y algunos bien largos para usar, por ejemplo, con pulóveres o remeras de escote bote. Además del escote, para elegir un collar hay que tener en cuenta las características del cuello de quien lo va a llevar: las mujeres de cuello corto no deberían usar gargantillas anchas y las bajitas tendrían que evitar los collares demasiado largos.

Y en el momento de comprar un accesorio, hay que tener en cuenta que si bien puede ser una excelente pieza, puede que no combine con el estilo de prendas que se suele llevar o que no sea adecuado a la contextura física de quien va a llevarlo. Por eso, a la hora de elegir hay que pensarlo como parte de un conjunto.