Pan integral casero
- 1 litro de agua (si hace calor, a temperatura ambiente; si hace frío, usar el agua caliente como sale de la canilla)
- 4 tazas de harina integral mediana
- 4 tazas de harina integral súper fina (y extra para amasar)
- 1 cucharada de miel (ingrediente no apto para niños menores de 12 meses; cambiar por 1cda. de azúcar)
- 10 gramos de levadura seca o 25 gramos de la prensada
- 2 cucharadas soperas de sal
- ½ taza de aceite de girasol o maíz
Disolver la miel y la levadura en el agua, agregar la harina mediana y 2 tazas de la súper fina y batir con cuchara de madera. Dejar levar media hora en un sitio tibio, cubierto flojamente con un repasador.
Agregar la sal e ir incorporando más harina súper fina hasta que, al revolver, la masa se despegue del recipiente. Incorporar el aceite, volcar en la mesada enharinada y amasar muy bien, agregando harina en la mesada hasta que la masa no se pegue a las manos. Dejar descansar una hora cubierta con un repasador.
Trabajar un poco la masa para desgasificar, cortar en 4 porciones y acomodar en moldes aceitados tipo budín inglés. Cubrir los moldes con un repasador y dejar reposar una hora más.
Llevar a horno mediano y cocinar aproximadamente media hora, hasta que al clavarle un cuchillo éste salga limpio. Desmoldar y dejar enfriar sobre rejilla.
La levadura de cerveza es un microorganismo al que hay que "darle de comer" para que su respiración haga crecer la masa: la miel, en este caso, es su alimento, y el la tibieza y la humedad generan el medio ideal para que haga su trabajo y el pan resulte súper esonjoso.