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Estimulación del lenguaje

La tentación de hablarle a los bebés como si uno también lo fuera es grande, pero no hay que caer en ella porque lo mejor para el desarrollo del lenguaje es hablarles correctamente para que incorporen de a poco distintas palabras.

Para desarrollar el lenguaje expresivo y comprensivo del niño, se aconseja hablarle y ofrecerle modelos, por ejemplo, contarle o describirle lo que se hace: “¡Vamos a bañarnos!”, “Te lavo el pelo con champú, y después te paso el jabón por el cuerpo (mencionando las partes del cuerpo)”, etc.

Entre otras sugerencias, podemos mencionar:

  • Hablarle correctamente, especialmente en relación con lo que están haciendo, por ejemplo, no utilizar sus palabras cuando nos referimos a un objeto que conocen, como “tete” por “chupete”. El niño pronunciará como puede, pero conviene que los adultos hablen correctamente.
  • Comenzar a enseñarle conceptos (el dedo es grande, este es chiquito, etc.).
  • Enseñarle canciones, cantarle una parte y que él complete la otra. A esta edad no hay que esperar que lo haga utilizando una palabra, sino una acción o sonido, que grafique esa parte de la canción.
  • Jugar al “Dónde está… Acá está”.
  • Decirle su nombre y su edad (sin esperar que él lo repita ya que es muy pequeño aún).
  • Enseñarle a conocer las partes de su cuerpo. Existen muchas canciones que abordan este tema.
  • Mostrarle fotos familiares para señalar los nombres de sus integrantes.
  • Hojear libros o revistas con imágenes de animales al mismo tiempo que se emiten sus sonidos: “guau”, “miau”, “cuac”, etc.

Por su deseo de imitar, el niño intentará reproducir las palabras que escucha habitualmente y logrará incorporarlas naturalmente a su lenguaje.

Bebés Estimulación temprana y desarrollo