Pasar al contenido principal

El primer encuentro

¿Cómo será el primer encuentro con mi bebé? ¿Por qué es importante que lo pongan enseguida piel a piel?

Durante los primeros momentos de su vida, vos y tu bebé comenzarán a conocerse y a establecer sus lazos de unión. Descifrar las señales del nuevo integrante, inmediatamente después del nacimiento, es todo un desafío y es importante que puedan estar cerca.

Estudios revelan la importancia de este momento tanto para la mamá como para el bebé, por eso se recomienda facilitar este primer encuentro, tan íntimo, demorando el lavado y control de peso y estatura del bebé. Lo cierto es que más del 95 por ciento de los bebés no prematuros son normales al nacer y pueden evaluarse luego de este primer contacto.

Una vez que el neonatólogo certifica que el recién nacido tiene buen color, que está activo y que es normal, lo cual se determina entre uno y cinco minutos después del nacimiento, es fundamental que lo coloquen sobre tu pecho, piel con piel, o sobre tu abdomen, o, si lo preferís, a tu lado, así tu hijo sentirá tu proximidad. De esta manera se produce el primer encuentro mamá-bebé.

Durante los primeros minutos y horas después del parto, la mamá se abre emocionalmente para corresponderle a su bebé y él, a su vez, está listo para observarla, reconoce su voz, su olor, mientras el cuerpo materno le provee calor. Cuando los bebés se hallan piel a piel, raramente lloran.

El recién nacido generalmente está muy despierto en las primeras dos horas de vida, y bien predispuesto para iniciar la lactancia, por eso, podés intentar ponerlo al pecho ya en la sala de partos. También, si es posible, cuando te llevan a la habitación tu bebé puede ir con vos para que le hagan los controles que falten allí, lo cual favorecerá el contacto y la conexión inmediatos.

Embarazo Preparación para el parto Parto y Lactancia Postparto y puerperio Lactancia Crianza, familia y educación Estimulación temprana y desarrollo